¡Hola a todos! Hace demasiado tiempo que no escribo un blog de viajes con niños. Pero… ¿cómo hacerlo con las limitaciones actuales? Voy aprovechar nuestro viaje a Cuenca con los niños para dar respuesta al aluvión de preguntas que he tenido de muchas mamis a través de Instagram pidiéndome recomendaciones.
Recomendaciones para viajar con niños a Cuenca
Lo primero que siempre os digo es que lo más importante de viajar con niños es saber que viajas con niños… lo que quiero decir: ellos mandan. Tenemos que adaptarnos a sus horarios habituales, no pretenderemos que los cambien de la noche a la mañana, bastantes cambios están teniendo con el viaje en sí. Tenemos que tener en cuenta el horario de comida, la siesta, la hora de ir a la cama, etc. Y eso no debemos modificarlo.
Por otro lado, también tenemos que buscar actividades para ellos. Y si queremos hacer alguna actividad más de adultos, debemos tener en cuenta que los niños se cansarán, se aburrirán y ello conllevará a situaciones desagradables que lo mejor es evitar. Así que fichar los parques cercanos al hotel o al restaurante y dejarles tiempo para que se diviertan: ¡veréis que ahí ni se cansan ni protestan!
¿Dónde alojarse en la ciudad de Cuenca?
En esta ocasión, nos decidimos por un hotel de la ciudad de Cuenca. Solo hicimos dos noches por lo que podíamos apañarnos. Os recomiendo coger el hotel con desayuno, así al levantarse solo tenéis que bajar a desayunar y no andar de un lado para otro buscando donde tomar un colacao. El hambre también pude provocarles rabietas. A los niños les chifla la idea de levantarse y bajar a elegir lo que quieran para desayunar. ¿A quién no le gusta un desayuno buffet? Si el viaje es para más días, ya sabéis que es preferible un apartamento o un apartahotel, para contar con más espacio, con lavadora y con cocina.
No obstante, existe una gran variedad de apartamentos disponibles para poder pernoctar durante nuestra estancia en Cuenca con todas las comodidades. Os dejo aquí una selección de apartamentos en Cuenca para que no os falte de nada durante vuestra visita.
¿Qué ver en la ciudad de Cuenca con niños?
Museo de Paleontología de Castilla-La Mancha
La gran actividad recomendada es visitar el Museo Paleontológico de Cuenca (MUPA). Un museo con restos fósiles de dinosaurios y réplicas de dinosaurios a tamaño real. ¡Les encanta! Además, el lugar es espectacular, con toda Cuenca a nuestros pies. Os recomiendo visitarlo al atardecer, porque la luz es maravillosa y la puesta de sol no puede ser más bonita. Ahora es gratuito, así que es una gran oportunidad. Os dejo la página web del Museo Paleontológico de Cuenca para que podáis encontrar toda la información.
Museo de las Ciencias de Castilla-La Mancha
Otra visita obligada es el museo de Ciencias. Una pena que con la situación actual no podamos tocar todos los simuladores, porque debe ser fascinante. Nos encantó. También es gratuito en la actualidad. A los niños les encantará.
Dispone de gran contenido multimedia para que los niños de la casa y los no tan niños disfrutes de su viaje a Cuenca conociendo sobre astronomía, el laboratorio de la vida, nuestro próximo futuro y los tesoros de la Tierra.
Paseo por el casco antiguo de la ciudad de Cuenca y sus casas colgadas
El paseo por el casco antiguo de Cuenca es obligado. Problema: las cuestas. Os recomiendo llevar el carrito si los niños son pequeños porque hay zonas verdaderamente complicadas. Tenéis que ver las casas colgadas, una de ellas es el Museo de Arte Moderno, por lo que os recomiendo aprovechar para entrar y ver la casa por dentro: ¡es preciosa! Y, por supuesto, cruzar el puente. De día y de noche. Es toda una experiencia. Los niños bien cogidos de la mano o en sus cochecitos, por favor, porque eso sí que da miedo.
Fue muy curioso ver a las monjas de clausura en el Convento de las Esclavas, en la plaza de la Merced. Fijaos si está abierta la iglesia y pasad, estarán rezando, y es muy conmovedor verlas, como si cambiaras de siglo al cruzar la puerta. ¡Asombroso!
Un problema es el tema coche. Es evidente que lo mejor con los niños es moverse por Cuenca en coche, pero en el casco antiguo es muy complicado aparcar y por la noche, además, está cortado. Como truco, es subir hasta el Parador y aparcar allí, pero solo podemos hacerlo si somos clientes. Así que… ¿qué mejor idea que reservar para comer y comer allí? Es un lugar espectacular. Y se come muy bien. Hay menú para los niños.
Como restaurante para comer o cenar os recomiendo el Mesón Plaza Mayor, junto a la catedral y pedir el morteruelo. ¡El mejor que probamos! Nos trajimos para casa y todo, pues lo preparan para llevar.
Paseo por la zona nueva de Cuenca
Otra de las zonas de Cuenca para visitar es la zona nueva. Allí hay una calle céntrica comercial. Pasaos por la típica confitería Ruiz y comprad los rosquillos de yema, típicos conquenses. (Calle Carretería, nº14). Aprovechad para pasar un rato en el parque San Julián y cenar por allí cerca.
¿Qué ver fuera de la ciudad de Cuenca con niños?
La Ciudad Encantada de Cuenca
En la Ciudad Encantada de Cuenca, nos encontraremos rodeados de las curiosas formaciones que se han producido a causa del proceso geológico del Karst sobre la piedra caliza y además estaremos en uno de los sitios declarados de interés nacional.
A los niños les va a encantar localizar las figuras más famosas de este conjunto natural a lo largo de todo su recorrido, disfrutando de la naturaleza y sus vistas. La visita puede ser recorrida sin complicación acompañados de nuestros niños, aunque si vamos con carro, es mejor llevar una mochila porta bebes.
Existen numerosos lugares donde poder acercarnos a la naturaleza cerca de Cuenca, como son las Torcas de los Palancares y las Lagunas de Cañada del Hoyo, el Nacimiento del Río Cuervo, la Laguna de Uña, el Parque Cinegético de El Hosquillo o los Callejones de las Majadas.
Para poner fin al viaje: Belmonte y su castillo
Y, por último, no podéis iros de Cuenca sin hacer una escapadita a Belmonte y ver el castillo. ¡Es impresionante! Nos encantó. Comed en la Muralla, restaurante muy recomendable. Además, en Bemonte nació el escritor Fray Luis de León y ya sabéis que la vida y obra de los escritores me atrae mucho.
Los niños podrán sentirse como verdaderos caballeros con las espadas de madera que podréis adquirir en la tienda de souvenirs que hay en el castillo. Al pasar os contarán la misma Juana la Beltraneja y Eugenia de Montijo la historia del castillo, desde el siglo XIV a la actualidad. Nosotros anduvimos buscando a la princesa y al fantasma del castillo. ¿Los encontramos? ¡Claro que sí! La princesa nos esperaba en la segunda planta, en uno de los aposentos. Y el fantasma… ¡ay el fantasma! Pues estaba en las mazmorras, claro. Eso sí, evitad que los niños bajen porque pueden pasar miedo.
Y hasta aquí os puedo recomendar. Contaos, para temrinar, que disfrutamos mucho de los paisajes manchegos del viaje por carreteras secundarias. Se produce un cambio apasionante de la Mancha profunda a la Serranía de Cuenca (Sistema Ibérico). Precioso para los amantes de la naturaleza.
Cualquier duda que os surja no dudéis en preguntar. Un beso muy fuerte,
Nos leemos en el próximo post.
África.